Cúrcuma, efecto antiinflamatorio

La cúrcuma, también llamada turmérico o azafrán indio, es una especia ampliamente utilizada, que tiene un intenso color amarillo naranja. La cúrcuma ha sido muy estudiada por su efecto antiinflamatorio, que se relaciona con un principio activo, la curcumina. Acompáñanos para conocer mejor sus muchos beneficios.

Qué es la cúrcuma

Se trata de una planta herbácea perenne, originaria de la India, que está relacionada con el jengibre. Se aprovechan principalmente los rizomas, cilíndricos, ramificados y cubiertos por una fina cutícula.

En muchas regiones de Asia se utiliza como colorante, tinte, especia o producto destinado a la cosmética, y en Japón se consume de forma habitual como té. Es uno de los ingredientes más importantes del curri, que lo contiene en proporciones variables según sea su tipo y al que da su color característico.

En la medicina tradicional china y en la ayurvédica de la India se la considera una planta mágica, con amplias propiedades curativas. Se ha utilizado durante milenios para aliviar afecciones hepáticas y cutáneas, así como para mitigar la tristeza y elevar el estado de ánimo.

En la actualidad, puedes encontrarla formando parte de complementos alimenticios formulados específicamente para mitigar el dolor en las articulaciones. También en cápsulas, en polvo y en té. Entre sus componentes principales figuran polifenoles y curcuminoides, aceites esenciales, ácidos grasos y turmerina.

Beneficios de la cúrcuma como antiinflamatorio

Uno de los efectos más importantes de la curcumina es su capacidad para bloquear el desarrollo de la inflamación. Los curcuminoides actúan en varios de los procesos fisiológicos en los que intervienen enzimas y péptidos.

  • Modulan la síntesis de sustancias proinflamatorias: prostaglandinas, leucotrienos, tromboxanos, ciclooxigenasas y lipooxigenasas.
  • Inhiben la actividad de algunas enzimas, como la colagenasa, la hialuronidasa y la elastasa, involucradas en la inflamación.
  • Activan las enzimas que metabolizan los subproductos tóxicos procedentes de la degradación de los lípidos.
  • Evitan la proliferación de las células del músculo liso en las arterias, protegiéndolas de la arteriosclerosis.
  • Impiden la activación del grupo de proteínas llamado NF-kB, que interviene en la inflamación del tejido muscular.

Por otra parte, las curcuminas tienen una potente actividad inhibidora de las rutas metabólicas que generan radicales libres, e intervienen en la activación del factor Nrf2. De esta manera, contribuyen a mantener el equilibrio redox y protegen los tejidos con su capacidad antioxidante.

Gracias a sus efectos antiinflamatorios y antioxidantes a nivel celular, alivia los síntomas de patologías muy diversas. Entre ellas destacan las enfermedades del sistema nervioso, como el alzhéimer, el mal de Parkinson y las epilepsias. Además, ayuda a controlar los procesos que intervienen en el desarrollo del síndrome metabólico y atenúa los síntomas de algunas patologías gástricas.

Adicionalmente, muchas personas saludables consumen cúrcuma para obtener otro tipo de beneficios. Entre ellos encontramos la disminución el estrés, conseguir un alto rendimiento mental y físico o mejorar la memoria y la concentración.

Para qué tipo de dolores podemos emplearla

La principal utilidad de la cúrcuma se ha observado en las afecciones osteomusculares, como las artritis y artrosis, en las que alivia el dolor articular. También es útil para contrarrestar las mialgias y contracturas musculares que aparecen después de los entrenamientos deportivos o del ejercicio físico intenso, y acelerar la recuperación posterior.

En estos casos tiene un efecto parecido al de los fármacos antiinflamatorios de uso común, como el ibuprofeno, ya que contrarresta la inflamación y funciona como analgésico para el dolor de huesos. La ventaja es que no produce los efectos secundarios renales o digestivos de esos medicamentos.

Cuál es la mejor manera de consumirla

Al principio te mencionamos que puedes encontrar la cúrcuma en distintas presentaciones. Aunque mucho influyen las preferencias personales, el té, tomado una o dos veces al día produce varios beneficios en las personas sanas.

El polvo se puede añadir en pequeñas cantidades a diversas preparaciones culinarias, como sopas, infusiones, bebidas y ensaladas. En este caso estarías utilizándolo como un condimento.

Las cápsulas tienen la ventaja que de que se puede calcular exactamente la dosis, y que ciertas combinaciones mejoran la absorción de la cúrcuma. El complemento alimenticio Olimina3, a base de polifenoles del aceite de oliva, contiene curcumina y omega-3. Proporciona una reducción del dolor y de la inflamación significativa en las personas que sufren trastornos osteomusculares.

Algunos ensayos clínicos indican que un gramo diario administrado de 8 a 12 semanas contribuye a reducir el dolor de rodilla y otras articulaciones afectadas por la artritis, así como los signos de inflamación.

La conclusión es que estas cápsulas pueden tener una efectividad y seguridad aceptables. Son comparables con las que se consiguen con los medicamentos antiinflamatorios comúnmente utilizados, como el diclofenaco y el ibuprofeno, pero sin las reacciones adversas que suelen tener.

El efecto antiinflamatorio y antioxidante de la curcumina representa un alivio sustancial para muchas afecciones, entre las que destacan las que cursan con dolor e inflamación articular. Visítanos para saber más sobre Olimina3, que te brinda los mejores resultados y con respaldo científico.

 

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